Muchas veces, cuando era niño, viajé en este "Furgón" (que era el nombre que recibía este coche), donde viajaban los Conductores y el personal de Correos y encomiendas. El viaje lo hacía en el Ramal Victoria_Lonquimay.
Acondicionado con camas, mesas de trabajo y una sala de correo, era un gran misterio cuando el Conductor, luego de revisar y cortar los boletos, entraba a este Coche... pero yo me lo conocía todo y entraba cuando quería... Son esos años que nunca olvidaré.. donde aprendí a querer a los trenes.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
0 comentarios:
Publicar un comentario